Sueños de distancia

Esta poesía nació con motivo de los viajes que hice en el año 2005 a Catamarca en calidad de Presidente de la delegación correntina a los Juegos Evita Categoría Sub 14, donde me emocionó ver cómo las chicas de la Escuela de Fútbol Yaciretá de Ituzaingó bajo la dirección de los profesores Walter Gómez y Omar García se coronaban campeonas nacionales, obteniendo así la Medalla de Oro, y las chicas goyanas del Club Unión dirigidas por los Francisco, padre e hijo, lograban el subcampeonato y la Medalla de Plata en el básquetbol femenino.

También en esa oportunidad y al mismo tiempo en San Juan los chicos de San Miguel conducidos por Fredy López lograban el campeonato y la Medalla de Oro en Voleibol Masculino Sub 14 y los de la Escuela de Fútbol Taragui con la conducción de Carlos Canteros obtenían el subcampeonato y la Medalla de Plata de esa disciplina.

Todo ello sin olvidar los logros del atletismo correntino, convencional y especial, que logró una cosecha nunca antes conseguida de medallas, incluyendo un récord nacional en salto en alto de Carlitos Lagoy con 1.75 m.

Además tuve la fortuna de acompañar a la delegación correntina a San Juan, esta vez en calidad de árbitro de fútbol, lo cual me permitió vivir una experiencia única en los Juegos Evita, porque de esta manera tres personas, el chofer del ómnibus -que nos trasladó en ambas ocasiones- mi hija Marcela que viajó como médica de las delegaciones y yo volvimos a nuestra provincia junto a tres equipos Campeones y otro Subcampeón de los Juegos Evita. Ya les dije antes de las chicas ituzaingueñas campeonas del fútbol y de las goyanas subcampeonas del básquetbol Sub 14, y en esta oportunidad el equipo correntino de Fútbol Masculino Sub 16 del Barrio Berón de Astrada conducido por mi amigo Carlitos Giménez también consiguió el título de Campeón y la correspondiente Medalla de Oro, lo mismo que el de Voley Sub 16 dirigido por el "Puma" Acosta.

Pero además con un "bonus" personal por todos los recuerdos que me trajo, puesto que volví a dirigir en los estadios de San Martín y de Desamparados de San Juan después de veinticinco años, ya que lo hice a principios de los '80 en aquellos viejos Campeonatos Regionales cuando era Arbitro Oficial de la AFA.

Volviendo a la poesía, tuve la suerte de recitarla a los chicos campeones de San Miguel en el 41° Festival de la Tradición que se realiza en aquella localidad en el mes de noviembre y que sirve de antesala al Festival de Tradición y la Artesanía que se lleva a cabo en el mes de enero. Y además, también la escucharon en el propio campo de juego las chicas campeonas de Ituzaingó, con todas las emociones que ello despertó en ambas ocasiones.

Yo cierro los ojos buscando distancias,
Nuevos horizontes que me hagan soñar,
Caminos que quiero recorrer con ansias,
Conocer otras gentes, ganar su amistad.

Un sueño me llama, una hermosa ilusión,

Allá lejos, muy lejos esperando está,

Sólo yo la veo hecha un rayo de sol
Y cuanto más me acerco más lejos se va.
Igual que las aves yo levanto vuelo,
Alas le pongo a mi imaginación
Para irme a lo alto, bien lejos del suelo
Y quitarle ataduras a mi corazón.
Cuántas ilusiones que llevo en el alma
Y me acompañan en mi peregrinar,
En mi deambular no existe la calma
Es tan largo el camino que sigo en mi andar.
Hay tantos lugares que quiero conocer
Y tantos paisajes que quiero descubrir,
Disfrutar sus bellezas con todo mi ser
Y en una poesía poderlas describir.
Yo ya sé que es muy duro el camino,
Que afiladas espinas esconden la flor,
Pero igual sigo y persigo mi sino,
Una estrella me guía con bello esplendor.
Catamarca me espera, ya estoy por llegar
Cruzando la bella Cuesta del Totoral,
El Portezuelo pinta con regio fulgor
En mil tonos distintos su hermoso verdor.
La luna deshecha en la noche sin par
Deja jirones en la cumbre de un cerro,
La tierra me llama, me tiende un encierro
Catamarca esperame, ya estoy por llegar.
San Fernando te veo, distingo tus calles,
Tus luces son estrellas caídas del cielo,
El corazón duele con tantos anhelos
Y quiero rezarle a la Virgen del Valle.
Más allá la Ciudad de Todos los Santos
Me dice que vaya hasta la Nueva Rioja
Que con vinos, risas, también con sus cantos
Hay amigos que esperan, ellos no se enojan.
Yo me voy más al Sur, camino a San Juan,
Impaciente me apuro, ya quiero llegar,
Buscando encontrar ese bendito sol
Que derrama en las viñas todo su calor.
Allá con los amigos yo habré de brindar
Con el rojo vino por nuestra amistad,
Rodeando una mesa tendida por mí,
Cantando a la vida, contento y feliz.
Me fuí tras un sueño, una hermosa ilusión,
Volé por los cielos en un rayo de sol,
Me fui a Catamarca, La Rioja, San Juan,
Mi alma suspira con tanto deambular.
Si todo fue un sueño, qué lindo es soñar
Y al amanecer no quiero despertar
Para seguir soñando sueños de distancia,
Disfrutar el viaje con todas mis ansias.
El sueño termina, todo tiene un final
Abriendo los ojos está la realidad,
Y aunque dentro, muy dentro, yo quiero partir
Me afirmo en mis pies, mi lugar está aquí.

De: Ramón Francisco Martín